La sexóloga y educadora Sandra Lustgarten habló en Cadena 3 Rosario sobre la la utilización de este medicamento cada vez más frecuentemente por parte de jóvenes y los riesgos que esto implica.

Aproximadamente tres décadas atrás, un laboratorio norteamericano descubría la función eréctil de la droga que cinco años después comenzaría a ser comercializada como sildenafil (comúnmente conocido como viagra) para los casos en que un hombre manifestara lo que se consideraba «impotencia sexual».

Hoy día, ese consumo usualmente ligado a personas mayores y en forma medicinal, se ha popularizado y no son pocos los jóvenes que optan por tomarlo, algo que viene encendiendo las alarmas de la comunidad médica.

“La realidad es que el viagra debe ser medicado y en la dosis que corresponde. Es una medicación que tiene que tener indicación; en cambio, se la van pasando entre amigos y la consiguen como pueden”, dijo la sexóloga Sandra Lustgarten a Rodrigo Ipolitti en Informados al Regreso por Cadena 3 Rosario.
Consecuencias. “Es un problema. Una de las consecuencias de esa medicación es que puede traer priapismo. Si eso pasa, si bien el viagra ayuda a la vasodilatación, esas arterias se llenan de sangre y esa sangre necesita una salida. Es el problema por el cual mucha gente va a atenderse, porque han tenido una situación de priapismo”.

Causas. “Tiene que ver quizás con toda la vida en las redes, la necesidad de cumplir con todas las chicas con las que arreglan salidas, más presión, la competencia con los amigos que cuentan y narran historias. No tienen demasiada experiencia y necesitan el bastón que los ayude a poder salir airosos de esta situación. Por otro lado, también por copiar amigos. Se genera algo así como una identificación con el héroe. O para probar”.

¿Otras motivaciones? “No hay ninguna sensación alternativa, de ningún tipo. Es más, si los chicos tienen como una idea que no es real, como toman mucho alcohol en las previas necesitan hacer algo que contrarreste la vasocontracción. Hacen esta mezcla que es gravísima y ocasiona daño arterial”.

Lo real y lo virtual. “Si bien no produce efectos de mayor sensibilidad, lo que sí tienen que saber los chicos es que por más que tomen viagra, si el estímulo no es importante, no va a funcionar. Los chicos no tienen que tomar viagra, esto es para los adultos también, que toman indiscriminadamente. Eso no va a cambiar el hecho de que no tenga deseo sexual”.

Déficit. “Habría que informar más, educar realmente acerca de los riesgos -que muchos no conocen- de estas medicaciones que se utilizan en forma indebida y sin saber cuál es el fin. Educar para que sepan lo que es un sexo seguro. Si hoy tenemos que hablar de enfermedades de transmisión sexual que vuelven a suceder, cuando era algo que parecía exterminado (sífilis, gonorrea) es porque hay que educar para que tengan más conciencia. Las cosas suceden por más que pensemos que es una etapa endiosada (la juventud)”.

Fuente: Cadena 3